DOMINGO X DEL TIEMPO ORDINARIO

Hermanos, una vez más nos encontramos juntos para alabar y dar gracias a Dios por todo lo que ha hecho por nosotros. Somos un pueblo escogido, una nación santa, reconciliada con el Padre y llamada a continuar la obra de Jesús. Bajo la guía de nuestros pastores, hemos de trabajar por llevar la Buena Nueva a todos.

1ª LECTURA: ÉXODO 19, 2-6a
SERÁN PARA MÍ UN REINO DE SACERDOTES
La primera lectura nos presenta cómo Israel ha sido escogido entre todos los pueblos por Dios y con El hace un pacto. Todos somos llamados a ser un pueblo sacerdotal para rogar, proclamar y ofrecer sacrificios por toda la familia humana.

SALMO: 99, 2.3. 5
Respondemos: “Nosotros somos su pueblo y ovejas de su rebaño”

2ª LECTURA: ROMANOS 5, 6-11
CRISTO MURIÓ POR NOSOTROS
Este pasaje de la carta a los romanos nos explica el gran amor que Dios tiene por cada uno de nosotros. Cuando éramos pecadores, Cristo nos reconcilió con Dios, nos hizo amigos.

EVANGELIO: MATEO 9, 36 -10,8

LLAMANDO A SUS DISCÍPULOS, LOS ENVIÓ
El Evangelio de hoy nos narra el envío por parte de Jesús de sus más íntimos colaboradores hacía el Pueblo de Israel, con la misión de sanar y proclamar la proximidad del Reino de Dios. Nosotros hemos de continuar esta misión evangelizadora.