En este nuevo siglo se va introduciendo,
especialmente en los jóvenes, la decisión de no casarse. Una chica me decía:
"yo sí quiero tener hijos; pero no quiero «amarrarme», quiero ser
independiente, libre, quiero gozar la vida... ".
Pienso que este comportamiento responde a una
ignorancia fundamental de lo que significa FORMAR UNA FAMILIA. En primer lugar,
el matrimonio es de DERECHO NATURAL
y la decisión de vivir juntos para formar una familia es PERSONALÍSIMA PARTE DE
LOS CONTRAYENTES.
¿Qué es un matrimonio natural? Desde que en este mundo empezó a existir un
hombre y una mujer, empezó a existir este DERECHO NATURAL. Consiste en la mutua
entrega y aceptación de sus vidas formando una sola entidad para constituir una
familia. Cuando la sociedad se organizó, empezó
a oficializarse y a legalizarse este matrimonio dando origen al matrimonio civil para salvaguardar los
derechos y deberes conyugales y filiales. Con la venida de Jesús, se instituyó
el sacramento del matrimonio para
SANTIFICAR EL MATRIMONIO NATURAL. Lo convirtió en medio de redención, de
santificación, de salvación: el esposo se salvará únicamente por el amor y la
fidelidad a su mujer (no, "mujeres"). Y la esposa se salvará por el
amor y la fidelidad a su marido (no, maridos).
¿Y los
hijos?
Constituyen los SÍMBOLOS, VIVOS, INTELIGENTES Y LIBRES, de esta unión
matrimonial. Cada HIJO es fruto
indiscutible de la esta unión (casi diría sustancial) de padre y madre. En él
está todo el padre y toda la madre. Cuando esta realidad experiencial la vive y
comprueba históricamente, se encuentra totalmente realizado, totalmente
perteneciente a sus padres. Todo en él, es referencia a papá y a mamá. Es el
"caldo de cultivo" para el desarrollo integral de una fortísima
personalidad, capaz de vencer todos los obstáculos de la vida. Jamás en ellos
se dará el fenómeno de la "DEPRE". Sucederá todo lo contrario cuando
esta experiencia no se da. Será el "almácigo" de una vida frustrada,
derrotada, sin sentido, abierta a desarrollar a los futuros "desadaptados
sociales", a los "monstruos", a los destructores de la sociedad
(con los robos, los crímenes, las violaciones), los "traficantes",
los narco-terroristas, los corruptos... Serán una contradicción viviente: SON, Y NO SON, ESA UNIÓN INDIVISIBLE DE SU
PADRE Y DE SU MADRE. Su comportamiento será una especie de venganza brotada
del subconsciente. ¿De quienes será la culpa?
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