Fundado: 24-04-1904 Lima, 19-07-2009 / Año 105 - Nº 5466 - 4000 ejemplares

EL SEÑOR ES MI PASTOR
Marcos 6, 30 - 34
§ Jesús mandó los Apóstoles de dos en dos, a predicar el Reino. Al volver le cuentan todo lo que han hecho y enseñado. Los encuentra cansados "porque no tenían tiempo ni para comer". Jesús se los lleva aun lugar apartado y los atiende. La gente los descubre y los precede y Jesús se ocupa de esa gente: "son como ovejas sin pastor" preocupado por los apóstoles, Jesús no abandona a la gente.
§ El Señor da una lección de servicio: poner nuestras cualidades al servicio de los demás. No usar de la posición para servirse a si mismo. Hay testimonios de gente que se entrega, para guiar al prójimo al amor de Jesús. Es un reproche a la sociedad egoísta, que busca su comodidad, haciendo avances técnicos sin importarle lo que sufre el prójimo. ¿Acaso las palabras del profeta Jeremías no tienen actualidad? ¿Acaso no se ha acrecentado el egoísmo? Y Jeremías lo hecha en cara a las autoridades, que en lugar de buscar el bien de las "ovejas", las han abandonado.
§ El único Pastor Bueno es Jesús. Todo debe ir dejándole el lugar a El. Que El aparezca con su luz para crear un hombre nuevo, con esa justicia y santidad que Cristo nos trae, derribando la enemistad. El Papa Juan Pablo II nos dijo: “No tengáis miedo de entregaros a Cristo" "¿Cuán lo será que los hombres se fíen de El?" Les da hasta la comida, multiplicando los panes y los peces. A los suyos los lleva a reposar del cansancio que les ha producido su acción apostólica. Depende de nosotros, restablecer y afianzar la alianza con el Padre por Jesucristo.

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