Fundado: 24-04-1904 Lima, 09-01-2011 / Año 107 - Nº 5544 - 4000 ejemplares

INICIO DE UNA MISION
Mateo 3, 13-17
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Hemos celebrado, en la Navidad, la primera manifestación de Jesús en su nacimiento, y ahora se nos presenta ya de cerca de treinta años, iniciando su vida pública. Hasta esta etapa, la vida de Jesús ha sido de una discreta intimidad; pero al iniciar su vida pública, Jesús desea ser bautizado en el Jordán. "Vino Jesús de Galilea al Jordán y se presentó a Juan para ser bautizado por él", con un bautismo de penitencia.
§ El Bautista se niega a bautizar a Jesús, porque lo conoce y ese bautismo es para arrepentimiento del pecador y ser agregado a la verdadera posteridad de Abraham. "Soy yo, dice Juan, quien debe ser por ti bautizado" Pero Jesús, deliberadamente quiere colocarse al lado del hombre arrepentido: "Déjame obrar ahora, pues conviene que cumplamos toda justicia". Es la primera palabra de Jesús en el Evangelio. Jesús nos muestra el camino.
§ Y "Juan aceptó". Al salir Jesús del agua se abren los cielos y vio Juan "al Espíritu de Dios descender como paloma y venir sobre Jesús, mientras una voz del Cielo decía: "Este es mi Hijo amado en quien tengo mis complacencias" Es toda una revelación. Isaías presenta al Mesías misericordioso que perdona: "No romperá la caña cascada ni apagará la mecha que se extingue". Jesús, desconocido hasta entonces, pasa a ser comentario de todos. Es una Epifanía y una proclamación del misterio del Hijo de Dios. Sin llamativas ceremonias, ni espectaculares discursos. Jesús se hace solidario con el hombre.
§ Es el Nuevo Israel en el que habitará toda justicia. Es la Iglesia como pueblo de Dios. Es el cumplimiento de las profecías. Es el amor palpable de Dios Padre proclamando al Mesías, y le hace "Cristo y Señor a ese Jesús a quien nosotros hemos crucificado".

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