Fundado: 24-04-1904 Lima, 20-11-2011 / Año 107 - Nº 5589 - 4000 ejemplares

¡HECHOS Y NO PALABRAS!
Por allí corre el dicho: "Los vivos viven del tonto y los tontos de su trabajo". Creo que este comportamiento se va generalizando... ojalá no tome cuerpo pues, la "costumbre se hace ley". En este mundo, el móvil es la economía, el comercio, la producción, para un enriquecimiento personal... Sin plata no se hace nada. Hace rato pasó al olvido lo del 'fíame, por favor'; lo de la 'yapita, casera'. Hoy, o tienes, o te mueres de hambre. Lo peor: ¡Nadie se conmueve! La solución rápida y que aparentemente tranquiliza la conciencia, si es que existe, es: ¡NO ES MI PROBLEMA! ¡YO NO TENGO LA CULPA!
Por otro lado, la corrupción nos va carcomiendo... la "justicia, el derecho, la misericordia", son conceptos y realidades que van desapareciendo a ojos vista. Cuando Jesús dice: MI REINO NO ES DE ESTE MUNDO, está haciendo alusión a otros principios y valores que deberán regir en SU REINO.
Pero, oh maravilla, ellos brotan en primer lugar de la misma naturaleza humana y del verdadero amor que llega a su máximo en el amor de la MADRE. Con la Revelación de Jesús, estos principios son elevados a su verdadera dignidad dándoles autenticidad y carta de ciudadanía en Dios, fin último de la humanidad. El Evangelio de hoy, nos recuerda que la vida humana, viene de Dios, que se desarrolla en este mundo, y que tendrá su plenitud, por medio de la muerte, en el Reino Eterno de Dios. Pero, según Cristo, la humanidad tendrá que desarrollarlos en este mundo mediante el ejercicio de la mutua caridad, ayuda y perdón; y, queramos, o no, tendremos que DAR CUENTA DE ELLO en el momento de nuestra muerte. Aunque los "vivos de este mundo" crean que son "los dueños" lamentablemente, la conclusión de esta vida será otra.
¿COMO ADMINISTRAS TU VIDA?, ¿CUÁLES SON TUS PRINCIPIOS DE VIDA?,
¿A QUE REINO PERTENECES?, ¿CUAL SERA TU FIN?

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