Lima, 01-01-2012 / Año 108 - Nº 5595

SANTA MARIA MADRE DE DIOS
Con María, nuestra Madre, empezamos un nuevo año civil llenos de esperanza. María nos invita a confiar y a ser osados en las manos de Dios, como Ella, que con su fe abrió las puertas a la era cristiana de la Redención. El Sí de María hizo posibles que seamos nuevamente Hijos de Dios por medio de su Hijo, llamado Jesucristo = Consagrado para ser Salvador.
PRIMERA LECTURA: Num 6, 22-27
La presencia del Señor en el Antiguo Testamento, fue asociada con su nombre invocando su bendición: "Que el Señor te bendiga y te proteja, te muestre su rostro y te conceda la paz". Somos bendecidos por la presencia de Cristo entre nosotros, gracias a María, su madre y madre nuestra.
"EI Señor habló a Moisés: «Di a Aarón y a sus hijos: Así bendecirán a los Israelitas: 'El Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti y te conceda su favor. El Señor se fije en ti y te conceda la paz'. Así, invocarán mi nombre sobre los israelitas y yo los bendeciré»".
SALMO 66
Respondemos: "El Señor tenga piedad y nos bendiga"
SEGUNDA LECTURA: Ga 4, 4-7
"Dios envió a su Hijo, nacido de mujer", nos dice Pablo. Este Hijo nos hace hijos adoptivos de Dios, nos enseña a llamarle "Padrenuestro", querido Papá, nos saca de nuestra situación de esclavos y nos hace herederos de las moradas eternas, junto a Él.

"Hermanos: Cuando llegó la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo el dominio de la Ley, para liberarnos del dominio de la Ley, para que recibiéramos la condición de hijos adoptivos de Dios. Y la prueba de que ustedes son hijos, es que Dios envió a sus corazones el Espíritu de su Hijo que clama: «iAbbá!, Padre», Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y, si eres hijo, eres también heredero por voluntad de Dios".
ALELUYA
En distintas ocasiones habló Dios antiguamente a nuestros padres por los profetas. Ahora, en esta etapa final, nos ha hablado por su Hijo
EVANGELIO: Lc 2, 16-21
Por su fe, los pastores conocieron de verdad a Jesús, y salieron alabando y glorificando a Dios por todo lo que vieron y oyeron conforme al mensaje que habían recibido. Seamos también nosotros portadores de esta Buena Noticia.
"En aquel tiempo, los pastores fueron corriendo a Belén y encontraron a María y a José y al niño acostado en el pesebre. Al verlo contaron lo que les habían dicho de aquel niño. Todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. Y María conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón. Los pastores se volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo que habían visto y oído; todo como les habían dicho. Al cumplirse los ocho días, tocaba circuncidar al niño, y le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción".
PILDORITA SALUDABLE
Ecl 3, 7: "...pues (el hijo) obedece a sus padres como si fueran sus amos"

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