REHABILITANDO NUESTRA BASÍLICA
¡Con alegría vemos los avances! El ánimo no nos falta; pero sí existen inconvenientes para nuestras celebraciones. Con el amor a María Auxiliadora, los superaremos:
- Estamos hermoseando la Capilla de la Piedad para los futuros matrimonios, cuando, por necesidad, cerremos la Basílica. Tengamos paciencia, pero con esperanza.
- Comprenderán también que LOS COSTOS son inmensos.
¡COLABOREMOS COMO VERDADEROS HIJOS DE MARÍA!
ES SU CASA, ES NUESTRA CASA.
Tus donaciones: BANCO DE CRÉDITO DEL PERÚ
TITULAR DE LA CUENTA : Congregación Salesiana del Perú - Basílica
CUENTA DE AHORRO EN SOLES : 193-16433599-0-93
CUENTA DE AHORRO EN DÓLARES : 193-16433616-1-11
EN EL TEATRO:
1er. ACTO: Un Di-no-saurio consumiendo heroína.
2do. ACTO: Un Di-no-saurio consumiendo cocaína.
3er. ACTO: Un Di-no-saurio consumiendo marihuana.
¿CÓMO SE TITULA LA OBRA?
DI-NÓ, a las drogas
Ja, ja, ja...
EL AÑO DE LA FE
BENEDICTO XVI (Síntesis)
25 frases de la "Porta fidei" de Benedicto XVI anunciando el Año de la Fe.
Comenzará el 11 de octubre de 2012, en el 50º aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II, y terminará en la solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo, 24 de noviembre de 2013.
1. «La puerta de la fe» (Hch 14, 27), que introduce en la vida de comunión con Dios y permite la entrada en su Iglesia, está siempre abierta para nosotros. Se cruza ese umbral cuando la Palabra de Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma. Atravesar esa puerta supone emprender un camino que dura toda la vida.
LA NECESIDAD DE LA FE AYER, HOY Y SIEMPRE.
2. Profesar la fe en la Trinidad -Padre, Hijo y Espíritu Santo -equivale a creer en un solo Dios que es Amor (1 Jn 4, 8): el Padre, que en la plenitud de los tiempos envió a su Hijo para nuestra salvación; Jesucristo, que en el misterio de su muerte y resurrección redimió al mundo; el Espíritu Santo, que guía a la Iglesia a través de los siglos en la espera del retorno glorioso del Señor.
3. Sucede hoy con frecuencia que los cristianos se preocupan mucho por las consecuencias sociales, culturales y políticas de su compromiso, al mismo tiempo que siguen considerando la fe como un presupuesto obvio de la vida común. De hecho, este presupuesto no sólo no aparece como tal, sino que incluso con frecuencia es negado. Mientras que en el pasado era posible reconocer un tejido cultural unitario, ampliamente aceptado en su referencia al contenido de la fe y a los valores inspirados por ella, hoy no parece que sea ya así en vastos sectores de la sociedad, a causa de una profunda crisis de fe que afecta a muchas personas. No podemos dejar que la sal se vuelva sosa y la luz permanezca oculta (Mt 5, 13-16). Como la samaritana, también el hombre actual puede sentir de nuevo la necesidad de acercarse al pozo para escuchar a Jesús, que invita a creer en él y a extraer el agua viva que mana de su fuente (Jn 4, 14).
Continuará...
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