Fundado: 24-04-1904 Lima, 14-10-2012 / Año 108 - Nº 5636 - 4000 ejemplares


¡RICO Y MENDIGO!
En un conversatorio sobre "promoción vocacional", la mayoría coincidía en que todo estado de vida y toda profesión se la debía valorar por la "PLATA QUE DA": sin ELLA, no se puede nacer, no se puede vivir, ni se puede morir. Sin el "BILLETE" NO HACES NADA EN LAVIDA. Un porcentaje menor expresaba que, era necesario analizarla de acuerdo con los valores que la hacen atractiva. Lamentablemente en nuestro modo de "ser criollos", "vivos" (un alto porcentaje), domina la primera. Muchos de nuestro muchachos piensan seguir un modo de vida y una carrera que les de medios para poder "vacilarse" en la vida, "pasarla bien", "gozarla". Es decir, pensar en vivir el presente, sin preocuparles el "mañana". No interesa si lo que busco, o por lo que me decido, "VALE LA PENA". Lo que cuenta es si gano o no gano PLATA. Lamentablemente, nuestro mundo va por ese cauce ECONÓMICO: VALES POR LO QUE TIENES, NO POR LO QUE ERES. Esta situación es "CALDO DE CULTIVO" para EL ROBO, LA INJUSTICIA, EL ABUSO, en fin, LA CORRUPCIÓN.
En el Evangelio de hoy, Jesús nos enseña QUÉ SON ES EN SÍ, LA RIQUEZA Y LA POBREZA.
LA RIQUEZA es un don de Dios, así como la Libertad y el Amor. Todos contribuyen, como medios, para nuestro crecimiento personal y para la construcción de este mundo ("Dominen el mundo"). Con la Riqueza, desarrollamos este mundo compartiéndolo igualitariamente. Con la Libertad, crecemos como personas autónomas y corresponsables. Con el Amor, formamos Familia, Sociedad, humanidad.
En este paso, Jesús se refiere "al rico" de este mundo que ha absolutizado las riquezas dándole el rango de Dios. Es por eso que es "imposible que un rico de este tipo entre al Reino de los Cielos, pues ya encontró aquí a su Dios "el dinero". Ya encontró su reino en esta tierra. ¿Cómo va a buscar otro Dios si ya lo tiene? ¿Cómo va a buscar otro reino, si ya lo posee? De allí la hipérbole (exageración) de Jesús: "Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre al reino de los Cielos". En este sentido, un rico de este mundo, es verdaderamente pobre de Dios y de su Reino.
En cambio, LA POBREZA, es relativizar la riqueza dándole su justo valor de MEDIO para poder llegar a Dios y procurar obtener el Reino. En una palabra, el verdadero pobre, puede ser un rico de este mundo, que no ha absolutizado la riqueza, y que relativizándola, promueve a sus semejantes compartiéndola generosamente.
¿Bajo qué criterio eres rico, o pobre? ¡PIÉNSALO, HERMANO!

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