Estamos
ante el MISTERIO
DE LOS MISTERIOS. Misterio significa una REALIDAD ESCONDIDA dentro de otra
realidad visible y diversa. Por tanto, no es evidente, no la puedo ver
directamente, no la puedo manipular; no es sensible a nuestros 5 sentidos; pero
sí, la puedo EXPERIMENTAR.
ACEPTAMOS ESTA
REALIDAD, no razonadamente (pues no hay evidencias (Del latín:
"e-videre": E, ex = desde fuera. Videre = Ver. Significa, pues, VER TOTALMENTE);
pero, SÍ
la aceptamos razonablemente
pues existen argumentos confiables de credibilidad.
Que
este misterio no sea conocido directamente por nuestros 5 sentidos, no quiere
decir que NO
EXISTA. ¡Y existen muchos misterios en nuestra realidad espacio
temporal que los ACEPTAMOS por las garantías que se nos dan! Un ejemplo:
El científico nos enseña sobre la velocidad de traslación de la de la tierra
alrededor del Sol: Nuestro planeta emplea un año (365 días) en recorrer su órbita, que es
aproximadamente 150'000,000 de Km. En un día recorre 410,958 Km . En una hora
17,123.28 Km .
En un minuto
285.39 Km .
y en un
segundo 4.76 Km .
De esto, no tenemos evidencia, no está en el campo de lo razonado; pero se hace razonable,
cuando el científico nos lo "revela" garantizándonos con argumentos
verídicos que esa es la
PURISÍSIMA VERDAD. Entonces confiadamente
aceptamos y ¡CREEMOS!
Lo mismo sucede con el MISTERIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD. Dios, el científico de los científicos, por
medio de su Hijo Jesucristo, nos revela y garantiza que DIOS ES EN SÍ MISMO, TRINIDAD: PADRE, HIJO Y
ESPÍRITU SANTO. TRES PERSONAS IGUALES Y DISTINTAS Y UN SOLO DIOS VERADERO.
Entonces, frente a estos argumentos razonables, dignos de credibilidad, ACEPTAMOS Y
HACEMOS NUESTRO ACTO DE FE. ¡CREEMOS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario