VIGILIA PASCUAL
Nos reunimos en el momento cumbre del año litúrgico: La Vigilia pascual. Vamos a celebrar la resurrección de Cristo, que pasa de la muerte a la vida, y nuestra resurrección con él, para vivir siempre en Dios. Jesús prometió resucitar al tercer día después de su muerte, y nosotros esperamos en oración el anuncio del ángel: "¡No está aquí. Ha resucitado!"
La vigilia pascual tiene cuatro partes:
1: La liturgia de la luz, en la que aclamamos a Cristo resucitado, luz que sale de la oscuridad del sepulcro e ilumina la vida de los hombres;
2: La liturgia de la Palabra, siete lecturas del Antiguo y Nuevo Testamento nos presentan los hechos maravillosos que Dios ha hecho a lo largo de la historia, para que recordemos las maravillas que obró en nuestro bautismo y nos alegremos por las que va a realizar hoy;
3: La liturgia bautismal, en la que el Señor renueva en los cristianos los dones que nos concedió en el bautismo y nosotros asumimos de nuevo los compromisos de aquel día santo;
4: La liturgia eucarística, encuentro con Cristo resucitado, en el pan y en el vino consagrados.
PRIMERA LECTURA: Génesis 1, 1.26-31a
En esta primera lectura, el relato de la creación. Dios con su palabra, trae a la existencia las distintas criaturas; el hombre creado a imagen y semejanza de Dios y a cuyo servicio pone el Señor todas las cosas. No es menos grande la nueva creación que Dios realiza por el sacrificio pascual de Cristo.
SALMO 103, 1-2a.5-6.10 y 12.13-14.24 y 35c
Respondemos: "Envía tu espíritu, Señor, y renueva la faz de la tierra"
SEGUNDA LECTURA: Génesis 22, 1-2.9a.10-13.15-18
Abrahán, para cumplir el mandato del Señor, sacrificar a su hijo; por su obediencia, Dios le promete multiplicar su descendencia y bendecir en él a todos los pueblos del mundo. Como fruto de la obediencia de Cristo hasta la muerte en la cruz, Dios multiplica por el bautismo el número de sus hijos y los colma de bendiciones.
SALMO 15, 5 y 8.9-10.11
Respondemos: "Proté
geme, Dios mío, que me refugio en tí"
TERCERA LECTURA: Éxodo 14,15-15,1
El paso del Mar Rojo fue para los israelitas la prueba de que su Dios es un Dios Salvador. Es un signo claro del bautismo, en cuyas aguas Cristo destruye nuestros pecados y nos da una vida nueva.
SALMO 1-2.3-4.5-6.17-18
Respondemos: “Mi fuerza y mi poder es el Señor...”
CUARTA LECTURA: Isaías 55, 1-11
En la invitación del profeta: oíd, sedientos todos. Acudid por agua..., hemos de escuchar al Señor que nos promete el Espíritu Santo. El Espíritu es el agua viva que brota de Cristo resucitado, y que purifica y fecunda el corazón del hombre. En el bautismo, el agua y el Espíritu nos purificaron y nos hicieron criaturas nuevas.
SALMO Isaías 12, 2-3.4bcd.5-6
Respondemos: "El Señor es mi luz y mi salvación"
QUINTA LECTURA: Ezequiel 36, 16-28
También nuestro corazón tiene mucho de corazón de piedra, también nosotros necesitamos el agua pura que nos purifique y el espíritu que nos renueve. El Señor realizó en nuestro bautismo este anuncio, y lo va a cumplir de nuevo en la vigilia pascual
SALMO 41, 3.5bcd; 42, 3.4
Respondemos: "Como el siervo al agua va..."
GLORIA
OREMOS
LECTURAS DE LA MISA:
LECTURA: Romanos 6, 3-11
CRISTO, UNA VEZ RESUCITADO, YA NO MUERE MAS
Las lecturas del Antiguo Testamento que hemos escuchado hasta ahora nos han anunciado la Salvación de Cristo. Las dos del Nuevo Testamento nos van a hablar de la Salvación que Cristo ofrece a los hombres. En esta lectura, san Pablo es muy claro: El bautismo nos incorpora a Cristo resucitado, que no vuelve a morir y que vive definitivamente para Dios. Por eso, el bautizado no puede volver a la muerte del pecado y ha de permanecer siempre vivo para Dios en Cristo Jesús.
SALMO 117, 1-2.16ab-17.22-23
Respondemos: "Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia"
EVANGELIO: Lucas 24, 1-12
¿POR QUE BUSCAN ENTRE LOS MUERTOS AL QUE VIVE?
Es el momento de acoger en nuestra vida el evangelio que se nos va a proclamar, la buena noticia. Dos buenas noticias sobresalen sobre todas las demás en la nuestra historia humana. Las dos las escuchamos los cristianos por la noche. En la noche de nochebuena. "Os ha nacido un Salvador, el Mesías, el Señor"; en la noche de hoy, en esta Vigilia pascual: "No está aquí. Ha resucitado"
LITURGIA BAUTISMAL
Nos reunimos en el momento cumbre del año litúrgico: La Vigilia pascual. Vamos a celebrar la resurrección de Cristo, que pasa de la muerte a la vida, y nuestra resurrección con él, para vivir siempre en Dios. Jesús prometió resucitar al tercer día después de su muerte, y nosotros esperamos en oración el anuncio del ángel: "¡No está aquí. Ha resucitado!"
La vigilia pascual tiene cuatro partes:
1: La liturgia de la luz, en la que aclamamos a Cristo resucitado, luz que sale de la oscuridad del sepulcro e ilumina la vida de los hombres;
2: La liturgia de la Palabra, siete lecturas del Antiguo y Nuevo Testamento nos presentan los hechos maravillosos que Dios ha hecho a lo largo de la historia, para que recordemos las maravillas que obró en nuestro bautismo y nos alegremos por las que va a realizar hoy;
3: La liturgia bautismal, en la que el Señor renueva en los cristianos los dones que nos concedió en el bautismo y nosotros asumimos de nuevo los compromisos de aquel día santo;
4: La liturgia eucarística, encuentro con Cristo resucitado, en el pan y en el vino consagrados.
PRIMERA LECTURA: Génesis 1, 1.26-31a
En esta primera lectura, el relato de la creación. Dios con su palabra, trae a la existencia las distintas criaturas; el hombre creado a imagen y semejanza de Dios y a cuyo servicio pone el Señor todas las cosas. No es menos grande la nueva creación que Dios realiza por el sacrificio pascual de Cristo.
SALMO 103, 1-2a.5-6.10 y 12.13-14.24 y 35c
Respondemos: "Envía tu espíritu, Señor, y renueva la faz de la tierra"
SEGUNDA LECTURA: Génesis 22, 1-2.9a.10-13.15-18
Abrahán, para cumplir el mandato del Señor, sacrificar a su hijo; por su obediencia, Dios le promete multiplicar su descendencia y bendecir en él a todos los pueblos del mundo. Como fruto de la obediencia de Cristo hasta la muerte en la cruz, Dios multiplica por el bautismo el número de sus hijos y los colma de bendiciones.
SALMO 15, 5 y 8.9-10.11
Respondemos: "Proté
geme, Dios mío, que me refugio en tí"TERCERA LECTURA: Éxodo 14,15-15,1
El paso del Mar Rojo fue para los israelitas la prueba de que su Dios es un Dios Salvador. Es un signo claro del bautismo, en cuyas aguas Cristo destruye nuestros pecados y nos da una vida nueva.
SALMO 1-2.3-4.5-6.17-18
Respondemos: “Mi fuerza y mi poder es el Señor...”
CUARTA LECTURA: Isaías 55, 1-11
En la invitación del profeta: oíd, sedientos todos. Acudid por agua..., hemos de escuchar al Señor que nos promete el Espíritu Santo. El Espíritu es el agua viva que brota de Cristo resucitado, y que purifica y fecunda el corazón del hombre. En el bautismo, el agua y el Espíritu nos purificaron y nos hicieron criaturas nuevas.
SALMO Isaías 12, 2-3.4bcd.5-6
Respondemos: "El Señor es mi luz y mi salvación"
QUINTA LECTURA: Ezequiel 36, 16-28
También nuestro corazón tiene mucho de corazón de piedra, también nosotros necesitamos el agua pura que nos purifique y el espíritu que nos renueve. El Señor realizó en nuestro bautismo este anuncio, y lo va a cumplir de nuevo en la vigilia pascual
SALMO 41, 3.5bcd; 42, 3.4
Respondemos: "Como el siervo al agua va..."
GLORIA
OREMOS
LECTURAS DE LA MISA:
LECTURA: Romanos 6, 3-11
CRISTO, UNA VEZ RESUCITADO, YA NO MUERE MAS
Las lecturas del Antiguo Testamento que hemos escuchado hasta ahora nos han anunciado la Salvación de Cristo. Las dos del Nuevo Testamento nos van a hablar de la Salvación que Cristo ofrece a los hombres. En esta lectura, san Pablo es muy claro: El bautismo nos incorpora a Cristo resucitado, que no vuelve a morir y que vive definitivamente para Dios. Por eso, el bautizado no puede volver a la muerte del pecado y ha de permanecer siempre vivo para Dios en Cristo Jesús.
SALMO 117, 1-2.16ab-17.22-23
Respondemos: "Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia"
EVANGELIO: Lucas 24, 1-12
¿POR QUE BUSCAN ENTRE LOS MUERTOS AL QUE VIVE?
Es el momento de acoger en nuestra vida el evangelio que se nos va a proclamar, la buena noticia. Dos buenas noticias sobresalen sobre todas las demás en la nuestra historia humana. Las dos las escuchamos los cristianos por la noche. En la noche de nochebuena. "Os ha nacido un Salvador, el Mesías, el Señor"; en la noche de hoy, en esta Vigilia pascual: "No está aquí. Ha resucitado"
LITURGIA BAUTISMAL
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