Sólo
entenderemos
la Obra de la Redención decretada por
el Padre en la plenitud de los tiempos por el Sacrificio de su Hijo Jesucristo,
su Verbo Encarnado, conociendo mejor su
máxima obra creadora, LA
HUMANIDAD , hecha a su imagen y semejanza. Si esta
Humanidad tiene sus procesos - modalidades de vivir su vida, Jesucristo deberá
seguir esos procesos y modalidades humanas, como hombre perfecto que es. El
proceso que garantiza este desarrollo humano es el de la MADRE.
Ella llega a lo máximo del amor humano, capacitándose para
formar familia: concibiendo la vida, aceptando con gozo el máximo de los
sufrimientos (el alumbramiento) PARA DAR
LA VIDA HUMANA.
¡AMA, SE ENTREGA, Y SUFRE LO MÁXIMO, INMOLÁNDOSE GOZOSAMENTE HASTA ACEPTAR LA MUERTE , PARA DAR LA VIDA ! En esto consiste su
GLORIFICACIÓN, SU REALIZACIÓN COMO MUJER, COMO MADRE.
Jesucristo recorrerá el mismo
proceso: nos AMA hasta el extremo, SUFRE lo máximo (Pasión y muerte) PARA DARNOS LA VIDA ETERNA.
Ahora
recién entiendo
lo del Evangelio: "Si el grano de
trigo no cae en tierra y muere no dará fruto" y por qué Jesucristo
tuvo que sufrir la crucifixión-muerte para darnos la Vida Eterna. Ahora entiendo porqué dijo que "no había venido a ser servido, sino a
servir". Y, "El que quiera
ser el primero que sea el último y el servidor de todos".
Como vemos, esta realidad ya está latente
(oculta y presente) en el comportamiento humano. Un paso más. ¿Quién posee la
máxima autoridad en la familia, célula de la sociedad y del origen de pueblos y
naciones? ¿No son los padres?. Sin embargo son los MÁXIMOS SERVIDORES Y SUFRIENTES DE SU FAMILIA, DURANTE TODA SU VIDA.
Lo hacen por el gran amor que nos tienen. Pues bien, aquí encuentro la realidad
y veracidad del binomio (¿nos suena raro?). LA
AUTORIDAD ES
SERVICIO. De allí, que los gobiernos, representantes de nuestros padres,
entran en la "colada". Si son autoridades, tendrán que ser
servidores. Por tanto, la existencia de autoritarismos, totalitarismos,
dictaduras NO TIENE SENTIDO. Estos, NO HAN ENTENDIDO AL HOMBRE. Una vez
más, Jesucristo no me está pidiendo nada extraordinario, pues ya está vivido y
practicado en la raza humana. REFLEXIÓNALO,
VÍVELO. Tienes tiempo en esta Semana Santa, en lugar de tomarla COMO VACACIONES FRÍVOLAS, OJALÁ, NO
PECAMINOSAS.